13 de mayo de 2010

Camps se sienta en el banquillo, es la hora de la justicia!

El PP y Camps, modelos de elegancia al poder...

El Tribunal Supremo ha reabierto la causa contra Camps por las dádivas (regalos y trajes) recibidas de la trama de corrupción popularmente conocida como Gürtel, que en su rama (podrida) valenciana era capitaneada por ese impagable y estrafalario personaje de alias Bigotes, jefe de la tapadera Orange Market. El TS ha apreciado suficientes indicios de comisión de delitos de coecho pasivo impropio (en palabras simple, regalos en función del cargo y como contropartida de determinadas decisiones o contratos no necesariamente delictivas), anulando el auto de archivación del TSJCV presidido por De la Rúa el 'más que amigo' de Camps. La interpretación muy peculiar de la sala presidida por el Presidente del TSJCV ha recibido un merecido varapalo, tal y como reza el auto del TS al cual ha tenido acceso el País:

"Debemos declarar haber lugar a los recurso de casación con estimación del primero de los motivos por infracción de ley dirigidos por el Ministerio Fiscal y por la acusación popular (PSPV) frente al auto dictado por la sala civil y penal del TSJ de Valencia en fecha 1/08/2009, casando y anulando parcialmente el mismo en lo atinente al sobreseimiento libre de las actuaciones declarado en el apartado quinto de su parte dispositiva. Con reenvío de las mismas al magistrado instructor de la causa para que continué su tramitación en la forma legalmente procedente, con declaración de oficio de las costas de ambos recursos".

La causa vuelve a al TSJCV, ahora el instructor José Flors deberá reabrir diligencias y dar paso a un juicio oral con jurado popular, cuya sala será presidida por el magistrado Juan Climent, el único que no había participado en la istrucción y posterior archivo del caso en Valencia.

Camps, un San Juan con Miedo en aprieto, emprende la huida hacia adelante.


La pelota ahora pasa a manos de Camps que ha sido pillado con las manos en la masa, porque el probable juicio oral contradice sus afirmaciones de que se ha pagado los trajes (que en todo caso según ha afirmado en declaraciones al juez fueron pagados con el dinero de la caja de la farmacia de su señora Isabel Bas...), una mentira que ha reiterado una y otra vez en declaraciones públicas y en muchas sesiones de control en Les Corts. Ha faltado a la verdad intentando desviar la atención del verdadero meollo de la cuestión: las adjudicaciones a dedo de centenares de contratos, fraccionados en importes inferiores a 12.000€ para así asignarlos sin publicidad ni concurso público, para que los beneficiarios -Orange Market, pero sobre todo la empresa Sedesa de los Cotino, Lubasa, Ortiz e hijos, etc..- engrosaran la cuenta B con la cual pagar las facturas de las campañas del PP. Eso es, estamos en frente de un posible/probable caso de financiación ilegal del Partido Popular, que ha cometido un delito y que además ha tenido una ventaja incontestable sobre las demás formaciones para ganar las elecciones, falseando de facto el resultado final.

El President ayer tarde intentó darse un baño de masas, emprendiendo una huida hacia adelante, marcando el territorio y anticipándose a Mariano Rajoy, además de hacer una demostración de fortaleza que tiene más de locura transitoria (prolongada) que de verdadera confianza en la salvación (por lo menos en esta tierra, que en la de los cielos seguro que le absuelven a cambio de penitencias y avemarías...). Ese baño de mini-masas, cuatro cachorros de nuevas genraciones y tan solo mitad de la junta directiva, de la tarde de ayer en el comité regional convocado de urgencia en la sede del partido en la calle Quart de Valencia, resultaba patente la sonrisa tensa y de circustancia (evidentes aunque se quisiera aparentar lo contrario), el desconcierto que con dificultad ocultaban las caras, de pocos amigos..., de Barberá y Clemente, frente a las frases del des-honorable Camps "Los 45 millones de españoles, saben que soy honrado, que tengo lo mismo que tenía cuando llegué a la política y nadie se puede creer que el presidente de una comunidad autónoma pueda venderse por tres trajes" (se cree que somos tontos: claro que no estúpido, a cambio has dado contratos y el PP ha recibido financiación ilegal para ganar las elecciones); "Soy como Juan Sin Miedo, no me preocupa nada"; "No descarto nada, incluido convocar elecciones anticipadas"... Un personaje de opereta, que ahuyenta la cagalera de sentarse en le banquillo con una demostración de fuerza aparente, un desafío al sistema judicial, a la sociedad y a su mismo partido que sabe que su líder es un inepto que ha sido pillado en emabarazosa conversaciones con su fiel escudero El Bigotes ("Amiguito del alma"; "Hablemos de los nuestro que es muy bonito"; "Te quiero un huevo"; "Tu sabes que te debo Mucho"; "No, yo te debo mucho a ti").

Si la cosa no fuera suficiente, nos quieren empantanar en las discusiones sobre si los trajes son corrupción o no, si es que todos aceptan regalos, porque solo Camps es imputado etc...Señores del PP, no somos tan ineptos como no quereis pintar, ya conocemos vuestros métodos goebbelsianos y vuestra tácticas de enredo: los trajes son la anécdota, la salsa rosa de un Juan con Miedo que se cree tan poderoso que acepta irse a una tienda de Madrid a hacerse unos trajes gratis total a cuenta del grande tejedor de Orange Market, dejando rastro de su paso, y dando pie a las sospechas de negocios ocultos que desembocan en la podredumbre apestosa de todo el PP. Esa es la cuestión, y no el estribillo de "alguien se cree que un President de esta comunidad se venda por tres trajes", que Camps ha servido en bandeja como consigna de prietas las filas que la brunete mediático-partidista del PP ha recogido y difundido urbi et orbi.

Intento desesperado que haremos bien en calibrar y contrarrestar, movilizándonos y plantando cara, bajando a la calle como así lo hicimos un buen puñado de ciudadanos honestos, en una convocatoria de urgencia delante de la sede del PP al grito de "No a la Corrupció, Camps Dimissió". Habrá más y muy numerosas, estamos al comienzo de un final glorioso, para recuperar la dignidad de todo un pueblo!

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