La putrefacción del PP emanaba sus gases envenenados desde mucho tiempo. Faltaban pruebas concluyentes, noticias de delitos e investigacione judiciales que dibujarán negro sobre blanco la cartografía del desmadre delitivo. Todos están pringados, aunque hasta la fecha hayan querido hacernos creer que había buenos (Ripoll pidiendo cuentas a Camps, que risa...!) y malos muy malos, como la panda de Consellers y el mismo Camps, sin hablar de Fabra, los alcaldes y concejales que sabemos que han estado en el ajo: Hernández Mateo, alcalde de Torrevieja (por las plusvalía de compra-venta de terrenos y posterior recalificaciones); el ex-alcalde de Alicante Díaz Alperi, (por los parkings del empresario Ortiz, por Mercalicante, por el negocio de Rabasa otra vez de Ortiz); el anterior de Orihuela Jose Luis Medina (por la especulación urbanísitica, el trato de favor, los negocios con la basura, etc...); los actuales alcaldes de Vilamarxant Vicente Betoret y de Ribarroja, Tarazona, por recalificaciones de terrenos, presuntas prevaricación y tráfico de influencias en el asunto de Porxinos; el alcalde de Xátiva y Presidente de la Diputación Alfonso Rus, por sus calumnias e injurias, y el derroche de caudales públicos; el de Vilareal inhabilitado por desacato; la Alcaldesa Barberá y sus concjeales por favorecer los interes privados con el patrimonio público (Tabacalera, Nuevo Mestalla) o poniendo en riesgo los valores culturales protegidos (Jardín de Monforte, Aparcamientos Subterraneos, el Cabanyal, Ciutat Vella) para favorecer los negocios de empresarios afines. Estos son algunos de los muchos que me salen así a bote pronto, pero la lista es casi infinita.
El hedor a putrefacción lo pervadía todo desde años, ahora que se levanta la tapadera conocemos la fuente de esa peste maloliente: el cuerpo corrupto y en avanzado estado de descomposición del Partido Popular. Que ha hecho gala de todo tipo de tejemanejes; ha exibido las denuncias y las imputaciones como si se tratara de trofeos; ha mantenido relaciones impúdicas con empresarios solo conocidos por la
facilidad con la cual se codeaban con la administración, todo a plena luz del día, y de la cual obtenían cuantiosos contratos; ha hecho leyes ad hoc para favorecer la especulación urbanísitca y esquilmar el territorio. Nadie está a salvo, todos están en el ajo, por más que quieran aparentar lo contrario. Ahora le toca a Ripoll, otros (Camps y sus legionarios) estarán brindando con cava del bueno por las desventuras de su peor enemigo! Todos tifamos Ripoll: que cante con su mejor voz, que lo cuente todo y tire de la manta, porque le han cargado el muerto, se han tomado la revancha y no moverán un dedo para salvarlo!
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