Vuelve el boato. Porque, os preguntareis acertadamente, se había ido...? Pues la verdad que no, de hecho ha estado siempre con nosotros: delante, detrás o al lado nuestro (gracias Mariano...).
Mención aparte merece el feísimo cartel, obra de Antonio de Felipe, sobrevalorado pintor de la Corte Ppera mercé el mecenazgo de Consuelo Ciscar en el menguante IVAM. Nos sirve de magnifica entradilla a lo que nos puede deparar ese gran acontecimiento mundial, que nos sitúa en el mapa otra vez [sic]. No es para menos: Valencia ha sido nombrada Capital Europea del Deporte 2011 (como lo oyen, oigan). Nos espera un año de celebraciones, de grandes eventos deportivos, que traerá glamour y millones de turistas entusiastas de poder presenciar manifestaciones deportiva de un excelso nivel. Será verdad?
Nos permitimos el beneficio de la duda, ya que la fuerza machacona de la propaganda Barberiana ha terminado por curarnos de espanto. Los hechos tozudos del deporte e de las instalaciones deportivas en la ciudad de Valencia, confirman el déficit de inversiones e instalaciones, sean ellas para el deporte base sean de infraestructuras para las manifestaciones deportivas de masa. Es verdad que se han construido unas cuantas piscinas y gimnasios municipales, aunque muchos de ellos en régimen de gestión privada, que ya se han quedado pequeños frente a la creciente demanda.
El deporte base en colegios e institutos no muestra señales esperanzadores, ya que la falta de instalaciones repercute de manera directa sobre la imposibilidad de los jóvenes de practicar el deporte desde la más temprana edad, fundamental para el crecimiento equilibrado y también para descubrir talentos. En este campo, los recortes no han esperado la crisis - ya que aún ahora las instalaciones construidas en el último año se ha hecho a cargo del Plan E -: la Fórmula1, a parte de apropiarse de fondos de cooperación, se hizo con más un 40% del presupuesto del deporte base. Una cuestión que aprecia sobremanera el presidente de la Diputación Alfonso Rus, que destina los fondos para deporte base destinados a los municipios para financiar con 348.000 euros al equipo de motociclismo de Jorge Martínez "Aspar", y con 200.000 euros a cada equipo de fútbol de la ciudad, Valencia CF y Levante UD.
No tenemos muchas más alegrías con las instalaciones deportivas que debían ser el buque insignia de Valencia. Estoy hablando por supuesto del estadio del Nuevo Mestalla, convertido en un monumento a la burbuja inmobiliaria y a la incapacidad del Gobierno del PP. Un esqueleto que muestra su vergonzosa desnudez desde hace más de 18 meses, un clamor contra la corrupción y la insolvencia de Rita Barberá y sus acólitos. Paralizado y a medio hacer, el estadio y por consecuencia Valencia, no pudo siquiera optar a la final de la Champion del 2011, ni al mundial de Atletismo ni ninguna de las otras manifestaciones del calendario deportivo internacional. Y ahora la capitalidad del deporte, hum no cuadra...
Peor les va a los aficionados al rugby, que con solo dos pistas donde entrenar y jugar siguen esperando un nuevo estadio en los terrenos del barrio de San Luis. Claro, es un deporte menor...Bueno, y que decimos del balonmano, fútbol sala, vóleibol? En nuestra ciudad no hay rastros de clubes de nivel, hay que acudir a los clubes del área metropolitana, que aguantan como pueden las penurias. Mientras los únicos que resisten son el baloncesto femenino y masculino, que cosechan algún que otro éxito. Parejo a lo que hace el club Terra i Mar de atletismo, puntero en España y en Europa, que a razón de sus éxitos ha sido utilizado para ensalzar de forma propagandística la gestión del Consell.
Un panorama gris, que los valencianos comprobamos a diario, que sin embargo se quiere maquillar con esa capitalidad, que en ámbitos europeos no parece tener la repercusión que se nos quieren hacer ver. De hecho, sabemos quién fue la capital europea del deporte de 2010? Y la de del 2009? Y las otras? La respuesta es obvia y se contesta sola.
Con Compromís trabajaremos para que Valencia sea la capital Europea de la Cultura, y que en un futuro no muy lejano seamos capital Europa de Medio Ambiente. Galardones de renombre que ellos sí hacen lucir una ciudad como Valencia, que puede proyectar en el futuro una imagen de modernidad y de talento!
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