Ardieron las Fallas

Punto y final a Las Fallas 2011. En la nit de la cremá, las llamas han engullido los monumentos falleros, dando por terminada la fiesta. Las llamas purificadoras de milenaria tradición son una buena metáfora para conjurar las esperanzas de que Valencia pueda resurgir de sus cenizas, para encarar con esperanza el futuro próximo.

Este año las Fallas han sido una larga larguísima celebración, casi 9 días, durante los cuales ha habido de todo. Y que como nunca he vivido con gran intensidad y participación.

Comenzaron con la siempre temprana instalación de más de 200 carpas en la vía pública. Prosiguieron con la accidentada Nit de la Plantá, con fuertes vientos que dificultaron los últimos remates en la instalación de los monumentos falleros. Los días fríos y lluviosos, sin embargo, no hicieron decaer la ilusión y las ganas de vivir en plenitud la fiesta. Ya que pronto dieron paso a las jornadas soleadas en los días grandes. Una ciudad llena a rebosar, las calles tomadas por las comisiones falleras en desfile acompañados de bandas de música (quizás, lo que más me gusta de las Fallas), centeneras de miles de visitantes curiosos y entregados al jolgorio.

Como siempre, a la alegría desbordada de falleros y falleras, hace de contrapunto las muchas molestias causadas a una parte importante de ciudadanos, que sufren los problemas y deciden huir de la ciudad. Merece una reflexión profunda sobre como trasformar la fiesta para que sea más respetuosa e integradora, para que todos se sientan parte de ella.


Con la candidatura de Compromís per Valencia hemos vivido las Fallas muy intensamente. Porque hemos participado en ellas muy activamente visitando comisiones falleras, participando en los actos programados por el Ayto. de Valencia (hemos estado en la mascletá en el balcón). Hemos visitado la exposición del Ninot que todos los años se muestran en una gran carpa en Nuevo centro. Hemos intervenido en los debates promovidos por las revistas falleras y las radios dedicadas a las fallas. Aportando nuestra visión, con una apuesta por la modernización de la fiesta, por recuperar la tradición y el espíritu crítico que siempre las han distinguido.

Todo a pesar de los intentos del PP, con Rita Barberá a la cabeza, de evitar que participaramos en los actos falleros, con esa burda censura a nuestro candidato Joan Ribó para que no participara en la cena de la Nit de la Plantá . Sin embargo, esas posturas censoras han tenido más bien el efecto contrario: por un lado ha puesto de manifiesto el intento partidista de Rita Barberá de patrimonializar las Fallas (por si quedara alguna duda...); por otro, demostrando el temor que tiene a que Compromís tenga representación municipal en las elecciones del 22 de mayo.

El balance final de las Fallas 2011 tiene tintes de color verde esperanza. Es verdad que no podemos estar contentos por el fuerte impacto ecológico de las fallas, en lo que concierne las toneladas de basura que producen; así como los materiales que se emplean para los monumentos, el corcho blanco derivado del petróleo, que en la combustión produce ese desagradable humo negro. El desmadre regado de pis y el vandalismo son otros puntos negros que hay que abordar e intentar cambiar. Sin embargo, por primera vez en años, la participación de Compromís ha sido una señal positiva hacia muchos valencianos y valencianas que no nos resignamos a dejar la fiesta fallera en manos de la derecha. Porque pensamos que Las Fallas son patrimonio de todos.